miércoles, 5 de noviembre de 2014

24 Meses

Hay fechas que se me quedan guardadas en la memoria, y aunque no cuente los días para que el calendario me lleve a ellas, cuando llega el día no puedo evitar poner mi atención allí.

Eso me pasa con el 5 de noviembre, tal día como hoy, hace dos años, empecé a "jugar" a ser emigrante para unos, inmigrante para otros y marché en busca de nuevos colores de otoño y algún que otro propósito más.

Creo que prometí escribir sobre la experiencia, mas nunca lo hice, igual que aquellas palabras que pretendí dedicar a tanta gente, y aún están en camino. En el fondo, a veces pienso que si hay cosas que aún no he escrito puede ser porque hay momentos que no deben ser prostituidos de esta forma, sin precaución, sin un refresco delante y sin una mirada de vuelta que confirme la complicidad. Quizás hay cosas que es mejor guardar y enseñar a unos privilegiados, aún a riesgo de dejar de mostrar preciosos recuerdos.

En fin, a lo que iba, hoy es 5 de noviembre y creo que ya ha llegado la hora de hacer público aquel conato de entrada que empecé a escribir hace ya 24 meses. Tal cual está en las notas de mi teléfono móvil las copio y las pego.

Esto es lo que escribía, si lo sigo pensando, si acerté o no, creo que aún está por ver.


Y entonces miras al cielo, luego al suelo y piensas "¿Ha valido la pena sufrir?" "¿Ha valido la pena coleccionar enemigos?".

Te preguntas qué será de todas esas cosas que dejaste a mitad, qué hubiera pasado si aquella conversación interior no hubiera acabado así. Y piensas si realmente ha merecido la pena.

Y no, no hay respuesta a la vista, quieres pensar que nada ha valido la pena, pero por otra parte sabes que si no hubiera pasado nada, si hubiera pasado algo, hoy no estarías ni así ni aquí.


Pd: leyéndolo ahora parece como si me fuera a morir y estuviera haciendo balance con mi vida, o como si alguna banda de mafiosos me estuviera buscando, cuando solamente era yo quien trataba de buscarme. Realmente, pensándolo bien, a la postre murió una parte de mí, no andaba tan desencaminado.