Hola, ¿cómo estás?
No creo que te sorprenda mucho que te escriba, ya sabes que desde hace un tiempo me dedico a juntar palabras que recuerden nuestra ya maltrecha relación de amistad por esta fecha. Como si con eso bastara, igual que el que celebra el amor solamente los catorces de febrero.
Lo que empezó siendo una coña hace unos años, es ya una tradición tan consolidada que seguramente si no te escribiera hoy, algunos se desilusionarían.Y pese a ello, debo reconocer que para mí, tampoco es un día más. Los veintes de abril tienen ese punto de especial que solamente las grandes fechas tienen: los cumpleaños, las noches de reyes y quizás deba parar de contar ya.
Reconozco que hubo un tiempo en que escribí esperando una reacción, removerte y que levantaras el teléfono o que tocaras a mi puerta, pero no, ahora escribo porque lo disfruto, como si en parte fuera mi día, olvidándome que todos los días deben ser míos, y tuyos y de todos.
Por mi parte, antes de que me lo preguntes, quizás te interese saber que sigo bien. No digo igual, porque ya sabes que seguir igual es imposible. Sí mantengo algunos rasgos. Sigo mirando con positivismo las cosas que la vida me trae, y hasta en el mayor de los lodos, buscando una gota de agua que me otorgue claridad (perdóname por este símil tan cursi y forzado). También me mantengo inconformista, porque no es incompatible con ser positivo.
No sé si recuerdas aquella noche en la cabaña de turno, aquel desplante o simplemente no sé si recuerdas que no pasó nada para que las cosas se enfriaran.
Y quizás pienses que nos debemos una conversación, una cerveza, unas disculpas o una explicación y debes saber que por mi parte no hay deuda alguna. Me basta con que si algún día tenemos tiempo el uno para el otro, no invitemos al orgullo a la cita.
Ante todo cuídate y procura que quienes te rodean te cuiden. Yo lo haría.
Mensaje a los incondicionales del 20 de abril: perdón, quizás esperaban otra cosa pero no sé ni cómo encontré 10 minutos de mi tiempo para esta entrada. Prometo comenzar a pensar en la entrada de dentro de 365 días.
No hay comentarios:
Publicar un comentario